Las cuotas iniciales reducidas conllevarían
1. Reducción de la morosidad y los desahucios, ya que las cuotas más bajas facilitarían a los hipotecados poder pagar las cuotas hipotecarias.
2. Aumento del consumo por parte de las familias ya hipotecadas, ya que deberían dedicar menos porcentaje de sus ingresos a pagar la cuota hipotecaria y por tanto dispondrían de más recursos para consumir.
El hecho de recibir más préstamo por una misma cuota hipotecaria inicial puede acabar suponiendo un incremento de los precios inmobiliarios. Si aun así estos no aumentaran , entonces
3. Aumento del consumo por parte de los futuros hipotecados, ya que estos pagarían cuotas iniciales más bajas y por lo tanto dispondrían de más dinero para consumir.
Si aumentan los precios, entonces el efecto 3 no se produciría pero a cambio:
4. Aumento del patrimonio de las familias, ya que la vivienda es su principal activo. De esta manera aumentaría su solvencia y tendrían más facilidad para poder acceder a nuevos créditos, renovar o renegociar los que ya tienen y aumentar la inversión.
5. Reducción de las pérdidas para los hipotecados que no pueden hacer frente al pago de la hipoteca. Aquellos hipotecados que a pesar de la reducción de la cuota no pudieran pagar, podrían vender su inmueble sin tanta pérdida (o incluso sin ella), ya que los precios habrían aumentado.
6. Aumento del consumo gracias al efecto riqueza . Aunque es un efecto discutido por algunos economistas, otros indican que el incremento de la riqueza conlleva un aumento del consumo.
7. Aumento de la concesión de préstamos a familias y empresas, ya que tanto el valor de los activos de los bancos como de las familias y empresas habría aumentado y por lo tanto el aumento de la solvencia de unos y otros facilitaría el retorno del crédito.
La estabilidad de las cuotas hipotecarias conllevaría
8. Estabilidad económica. Esta no es una medida temporal sino estructural y por lo tanto una vez implementada no conllevaría cambios posteriores. Esto supone un beneficio respecto a algunas de las decisiones que se toman hoy en día para estimular la economía y estabilizar los mercados financiero e inmobiliario. Por ejemplo, la decisión de la Fed de recuperar el mercado inmobiliario a base de bajar artificialmente los tipos de interés supone un riesgo de cara al futuro cuando la economía se recupere y sea necesario aumentar los tipos de interés.
Finalmente todas estas ventajas se producirían
9. Sin coste para el contribuyente. El cambio de un sistema de hipotecas nominales a un sistema basado en las indexadas a la inflación no debería suponer ningún coste para el contribuyente, ya que sólo se trata de racionalizar el pago de las cuotas hipotecarias. El gobierno debería facilitar que este cambio fuera lo menos costoso posible para los hipotecados y los bancos.