Dentro de este grupo de productos, los bonos indexados, y especialmente los emitidos por los tesoros públicos, son los que tienen un mercado más desarrollado. En EEUU se llaman TIPS (Treasury Inflation-Protected Security), en el Reino Unido Index-linked GILT y Bund Index en Alemania ... Aunque todavía representan una cuota pequeña de mercado en la mayoría de economías, el porcentaje de deuda emitida ha ido creciendo en los últimos años. La mayoría de economías comenzaron su emisión a partir del final de la década de los 1990s. En Suecia o el Reino Unido representan alrededor de un 25% de la deuda emitida por el Tesoro, en Francia o Brasil alrededor del 15%, en EEUU alrededor del 8% y en la zona Euro en torno al 4%.
Respecto los bonos corporativos todavía resulta un mercado pequeño y reservado a las grandes corporaciones de los mercados más desarrollados como el Reino Unido. Aún así, el desarrollo del mercado de deuda pública indexado está permitiendo que el privado comience a ganar terreno. Desgraciadamente hay una gran carencia de productos indexados para el mercado hipotecario, salvo algunas excepciones como Islandia o Chile (con algunas particularidades).
Los fondos de pensiones son los principales clientes de este tipo de productos, ya que les permite garantizar el poder adquisitivo de sus partícipes sin tener que gestionar ni asumir el riesgo de la inflación.